Este sábado, una de las leyendas del triatlón tuvo su carrera de redención: Jonathan Brownlee (GBR) volvió a triunfar. Luego de una temporada un tanto floja en la que tuvo tres participaciones en la SMT pero en la que nunca llegó al rendimiento al que estaba acostumbrado, el doble medallista olímpico demostró que aún puede ser temible. En esta ocasión, el menor de los Brownlee se adueñó de la carrera de Edmonton y volvió a ser favorito. Mario Mola (ESP) fue plata y demostró que aún está en carrera para un nuevo título, y Marten Van Riel (BEL), fue bronce y subió a su primer podio de la Serie.
En un día soleado, los hombres dieron inicio a la carrera sprint de Edmonton, y Vincent Luis (FRA), actual líder de la SMT, se puso a la cabeza en el agua, seguido de cerca por Van Riel, Ben Kanute (USA), Brownlee y Matt Hauser (AUS).
Todos los integrantes de este grupo son ciclistas de poder, y hoy lo demostraron al lograr una ventaja de 20 segundos con rapidez. Sin embargo, un numeroso pelotón de perseguidores, se dispuso a dar pelea.
Los perseguidores se organizaron con prontitud. Atletas como Mola, Javier Gomez Noya (ESP), Fernando Alarza (ESP), Hayden Wilde (NZL), Tyler Mislawchuk (CAN), y Jelle Geens (BEL), trabajaron para controlar la situación. Detrás, Jake Birtwhistle, otro de los favoritos de esta temporada, llegó desde atrás pero quedó pedaleando solo y abandonó tras tan gran esfuerzo.
Los seis líderes se turnaron para mantener la brecha, pero los miembros del segundo pelotón comenzaron a tener problemas al final de la segunda etapa. Durante la última vuelta de este segmento, y camino a la transición, Reinaldo Colucci (BRA) y Stefan Zachaus (LUX) colisionaron mientras se quitaban el calzado, con lo que muchos atletas, entre ellos, Javier Gomez y Jelle Geens, chocaron con ellos y quedaron fuera de competencia.
El primer pelotón pisó el asfalto, y Matt Hauser intentó lograr una ventaja desde el primer kilómetro. Jonny Brownlee lucía en forma óptima, y en control completo de la carrera. Martin Van Riel los seguía de cerca, hasta que los líderes comenzaron a aumentar la diferencia. Dos de ellos iban corriendo cabeza a cabeza cuando Brownlee aceleró y se deshizo de Van Riel en la última vuelta y cruzó la meta en primer lugar para recibir el oro.
“Sabía que lo podía hacer. Sabía que estaba entrenando bien; solo tuve mala suerte una y otra vez. Ha sido difícil, pero finalmente gané”, dijo el británico. “Nadé muy bien, y me comprometí con el trabajo en la bicicleta. Corriendo fui más veloz de lo que pensaba, y me sentí muy biern. Mentiría si dijera que no te importa cuando la gente dice que ya no espera verte rendir bien. Pero si tengo en cuenta mi entrenamiento, veo que estoy en estado, y todavía creo que puedo correr mucho mejor en esta misma temporada. Estoy cerca … es cuestión de tiempo”.
Detrás, Mario Mola estaba decidido a llegar a su sexto podio en Edmonton por lo que comenzó a pasar atletas hasta que solo le quedaba Brownlee, a quien no pudo superar y entonces fue medalla de plata, suficiente para ser el segundo de la SMT. “Todos hicieron un gran trabajo en el frente. Hicimos lo posible para tratar de que la distancia fuera lo más corta posible, pero sabía que si ellos corrían bien, no podría alcanzarlos. Di todo. Estoy muy feliz con mi lugar actual. Es hora de volver a trabajar”, dijo el español, quien no participará en el evento de prueba de Tokio para concentrarse en la carrera de Lausana.
Todo sonrisas, Van Riel cruzó en tercer lugar, su mejor marca hasta la fecha, y tercer podio consecutivo para un atleta belga. “He estado esperando por esto toda mi vida, estoy muy feliz de haberlo logrado. Estuve cerca del podio muchas veces, pero siempre me quedaba corto. Hoy todo se dio bien,” agregó.