El autor estadounidense John Green dijo, “Puedes amar mucho a alguien…pero nunca puedes amar a alguien tanto como lo puedes extrañar.”

Nada es más doloroso que un fallecimiento repentino. La joven triatleta en categorías por edades Freyja Lee (de Brisbane, Queensland, Australia) falleció en 2019 y dejó a sus familiares y amigos confundidos, doloridos… extrañándola desesperadamente.

Freyja amaba el triatlón y a sus jóvenes 21 años, había alcanzado grandes logros, completado muchos triatlones de larga distancia. Freyja se comprometía con el deporte, tanto, que fue capaz de convencer a su novio James Bailey de participar en el triatlón de Mooloolaba que se convirtió en un evento especial para ellos, ya que compitieron juntos en 2018 y 2019.

Este año el Triatlón de Mooloolaba tendrá lugar el 15 de marzo, y los mejores amigos de Freyja, triatletas y gente que no practica el deporte, se convocarán en la línea de largada en honor a su amada amiga.

“Creo que tener tanta gente participando aquí me convenció,” dijo James. “Todos se mostraron muy compasivos y ahora hay casi 30 personas en la competencia. No todos lo harán como atletas, pero lo harán en su memoria. Nadie había mostrado interés por el triatlón antes de su fallecimiento, pero cuando se nos ocurrió la idea, todos se sumaron y van a acompañar.”

“Somos tres o cuatro los que haremos la distancia olímpica, el resto hará la sprint. Mooloolaba es un gran lugar, una de las carreras favoritas de Freyja, la disfrutamos mucho juntos, y el año pasado nos quedamos a pasar el fin de semana, salimos a comer y a celebrar después de la carrera porque los dos habíamos hecho muy buenos tiempos,” agregó.

La pareja se conoció en el trabajo cuando Freyja estaba por hacer su primer tría de larga distancia.

“Quedé perplejo cuando me enteré de que había un evento tan largo. El triatlón requiere mucha entereza mental, y ella la tenía, era muy determinada, no aceptaba un “no” por respuesta, amaba los desafíos y el aspecto de resistencia del deporte. Yo había hecho algo de natación y de pedestrismo en la secundaria, y sabía que el triatlón era demandante, pero nunca había considerado probar hasta que la conocí. Comenzamos a vernos por el triatlón,” explicó.

Juntos disfrutaron de la competencia y de la mutua compañía, pero el mundo de James, y el de sus familiares y amigos cambió para siempre el año pasado con una llamada telefónica desesperante.

“Freyja había estado teniendo preocupaciones comunes a muchas personas de esta edad, pero pienso que fue mucho para ella, que se sintió abrumada. Recibí una llamada de una de sus amigas, me dijo que fuera urgente. No dijo mucho más, pero me apremió a ir a su casa urgentemente y a llevar algo para romper la puerta.”

“Llegué muy rápido y la encontré inconsciente sobre la cama. La ambulancia llegó y la llevó a emergencias en el hospital. Fueron muy eficientes, ver a los doctores y enfermeros haciendo su trabajo es conmovedor.”

Los amigos de Freyja se mostraron consternados al recibir la noticia y fueron inmediatamente al hospital para apoyar a su amiga y acompañarse mutuamente.

“Un miembro del personal del hospital dijo que nunca habían visto tanta gente visitando a alguien. Tanta gente la amaba. Una noche éramos 20 en la sala de espera. Es difícil entender que alguien que es querido por tanta gente, pueda sentir falta de amor. Es inimaginable.”

Freyja falleció a los dos días, dejando a James, su familia y amigos, desesperados, incapaces de comprender lo que había pasado.

“Fue y todavía es difícil de entender,” dijo. “Tengo muchos días malos, pero veo vídeos y leo mucho acerca del suicidio. Lo ves en las noticias pero no lo dimensionas hasta que es tu propia realidad, hasta que le pasa a alguien cercano. Y luego te golpea en la cara, tienes un sentimiento permanente de pérdida, un vacío en tu corazón que no se va. Cuando pasas de ver a alguien cada día a no verlo más… es muy difícil.”

Cuando los amigos de Freyja se reúnan en el Triatlón de Mooloolaba, tendrán la oportunidad de recordarla haciendo lo que ella amaba. Tendrán la chance de transmitir un mensaje a la comunidad de cuidarse los unos a los otros.

“Hice remeras para que la gente las use en la bicicleta y corriendo a pie. Son blancas y tienen el símbolo que le gustaba tanto a Freya en el frente, y un pequeño mensaje atrás que dice, “En memoria de nuestra amiga Freyja a quien perdimos por suicidio’.”

“Para mí es difícil, quedaron muchas preguntas sin responder que me gustaría hacerle, todo lo que siento que podría haber hecho y no hice. Siempre debemos observar a la gente para aseguraros de que están bien. Hay que pensar que la persona con la que estás hablando puede estar sufriendo por algo que no ves,” dijo James.

Los amigos de Freyja han recolectado alrededor de $12000 para Beyond Blue, una organización para la salud mental sin fines de lucro que ofrece información y apoyo para ayudar a que todos en Australia alcancen la salud mental plena, cualquiera sea su edad y lugar de residencia.